1 rodaja de limón de 1 cm.

1 lata de durazno, sin almíbar.

2 huevos.

¼ taza de azúcar pulverizada.

½ litro de crema para batir (Kempis).

Poner la crema en la licuadora y conectar en baja velocidad, hasta quedar endurecida. Vaciar en un tazón. Poner en la batidora las yemas, el azúcar, el limón y los duraznos. Conectar en alta velocidad hasta quedar tersos. Con un batidor de mano batir las claras hasta que queden duras. Revolver los duraznos y las claras con la crema batida. Poner a congelar en 2 bandejas de refrigerador.


ñam ñam